Y si nos desayunamos la Luna??? Croissant

Buenos días amig@s!!!

A quién no le gusta un rico croissant para desayunar o merendar, o simplemente darse un capricho???

Pues en la entrada de hoy, vamos a enseñar paso a paso, de como realizar estos croissant, para darse el capricho..

La historia del croissant, se remonta al siglo XVII en la antigua Viena, que los panaderos realizaban unos panecillos dulces en forma de media luna.. La historia es más amplia e interesante de conocer.

Vamos a comenzar con los ingredientes. La masa para realizarla da un poco de faena, pero vale la pena por el resultado final.

500 gr. Harina común
250 ml. Agua templada
25 gr. Levadura fresca de panadería
10 gr. Sal fina
50 gr. Azúcar blanquilla
175 gr. Mantequilla sin sal.
1 Huevo batido + 2 cucharadas de agua. (Para pintar los croissant)

Una vez tengamos todo preparado, empezamos a realizar la masa.
Mezclamos la harina con el agua, incorporamos la sal y el azúcar, la levadura desmenuzada y amasamos bien unos 5 - 6 minutos.

Dejamos reposar la masa para relajarla. Amasamos de nuevo unos 4 minutos más (Si tienes una amasadora, será más rápido este proceso).

Estiramos la masa en forma rectangular y la colocamos en una bandeja, forrar con papel film y meterla en la nevera.
Ahora con la mantequilla fría, la forramos con holgura con papel film o papel de horno, y la vamos aplastando hasta formar un cuadrado. La dejaremos reposar también en la nevera.

Pasada una hora, sacaremos la masa y la mantequilla.
Primero estiramos la masa un poco y colocamos la mantequilla en la mitad de un lado de la masa. La cerraremos como si fuera un libro. Para integrarla, primero la estiramos por una mitad (del centro a la punta) y luego por la otra mitad. Una vez estirada la dejamos reposar unos 10 minutos para relajar la masa. Después la cerraremos como si fuera un tríptico, y volvemos a estirar.

Colocar en la bandeja, forrar con film y dejar en la nevera unos 20 minutos. Esta operación la repetiremos como unas 4 veces, para que se formen las láminas en la masa.
En el último estirado, cortaremos la masa, como si fueran triángulos isósceles. Estiramos un poco la masa y la enrollaremos con la forma característica del croissant. Colocar en una bandeja de horno, forrada con papel.

Tienen que reposar hasta que doblen su volumen a temperatura ambiente.
Una vez levados, calentamos el horno a 180 ºC. Y antes de meterlos, pintaremos con el huevo batido con las cucharadas de agua.

Opcionalmente, se le puede poner frutos secos, azúcar glass o azúcar normal. Y los horneamos hasta que se doren, unos 20 minutos.

Cuando se han horneado y enfriado un poco, se pueden pintar con miel, azúcar invertido o mermelada. Al gusto.
Y sólo queda degustar estos croissant caseros, que aunque son laboriosos, vale la pena realizarlos y así disfrutar del gran trabajo!!

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Feliz y dulce día!!!